sábado, 27 de abril de 2013

Un año con el niño de mis ojos (L)


Mi historia con él comenzó un 28 de abril, hace justo un año. Aquella noche mi corazón latía a mil por hora, como si en algún momento se me fuera a salir del cuerpo. Nunca me hubiera imaginado que lo que empezó entre risas y copas se iba a convertir en lo mejor de mi vida; quien me iba a decir que aquel chico me robaría el sueño.

Y es que solamente él consigue que todos mis miedos desaparezcan con sólo un abrazo, que ya no mida nunca más las veces que digo "TE QUIERO" porque esta vez lo siento de verdad.
Yo no sé cómo la gente sabe que está enamorada, pero yo lo sé porque cuando le miro siento que le conozco desde siempre y que el tiempo no nos va a separar, porque me gusta todo de él, porque siento que mi mundo se viene abajo cuando estamos lejos, porque con sólo mirarle sabría que va a estar conmigo SIEMPRE, no se por qué, simplemente lo sé...

Sólo quiero que sepa que le agradezco todo lo que hace por mí, y todo lo maravilloso que me hace vivir, porque encontré en él todo lo que jamás  nadie pudo darme antes.
Sé que no existe nada que pueda superar mi deuda eterna con él, por todos los momentos de felicidad que me ha entregado; pero sí puedo prometer que hasta el final de mis días mi corazón va a ser suyo, solo suyo.



jueves, 25 de abril de 2013

Que no hay más nostalgia que la de perderse.


Días en los que sientes que no encajas en nada, que no sabes cómo empezar a decir las cosas o simplemente no tienes palabras para describir lo que sientes, porque ni siquiera tú lo sabes. No todo depende de que el primer pie que toque el suelo al levantarte sea el izquierdo, ni que a las 7:00 de la mañana se te cruce un gato negro.

Últimamente, antes de dormir pienso en todo aquello que me gustaría cambiar. Y me asusto al pensar que serían demasiadas cosas. Y soy tan cobarde que me veo incapaz.
Me miro al espejo, y la chica de enfrente me mira con la mirada pérdida, diciéndome sin palabras que mis ojos no son más que un mar de dudas e incertidumbre dónde se me hace difícil nadar. Mucho hablar sobre los demás, pensar en amar a los demás, criticar los defectos de los demás… y aún no sabemos nada de nosotros mismos.

Es posible que últimamente tenga demasiada presión, que nada me inspira.